La teoría del ciclo vital -o teoría de las etapas vitales, como también es conocida- fue desarrollada por Erik Erikson y se basa en una idea muy simple: cada uno de nuestros ciclos en la vida procede de un conflicto y, si queremos avanzar de manera psicológica y social, debemos superarlos y aprender de ellos.
Es una teoría que parte de las del desarrollo evolutivo de Freud, pero poniendo más énfasis en la identidad, el aprendizaje y la interacción social. Gracias a ella, podemos comprender la manera en la que la personalidad de los individuos se va desarrollando a lo largo de su ciclo vital.
Los 8 estadíos de la teoría del ciclo vital
Esta teoría, en la que se van resolviendo diferentes crisis existenciales, tiene 8 etapas que debes conocer. Cada una se da en una edad concreta y es importante conocerlas todas, pues es probable que las vivas varias veces: la primera será cuando te sucedan a ti misma y las posteriores cuando influyas en ellas como madre, tía, abuela o con cualquier otro rol. Al saber en qué consisten y lo que quien las vive debe aprender de ellas, podrás guiarle en el proceso y ayudarle con esa transición.
- De la desconfianza básica a la confianza
Esta primera etapa se da desde el nacimiento hasta que cumples el primer año de vida, y es cuando debes aprender a confiar en tus padres y en quienes te rodean.
Lo desconocido siempre provoca incertidumbre y desconfianza, pero si recibes unos cuidados adecuados, aprenderás que, por muy mal que vayan las cosas, siempre terminarán mejorando.
- De la vergüenza y la duda a la autonomía
Es la segunda etapa de la teoría del ciclo vital y se da entre los 2 y los 3 años, que es cuando te ves obligada a comenzar a realizar tareas de manera autónoma. El reto es crecer aprendiendo a tener esa autonomía a la vez que cumples las normas que establecen tus padres, sabiendo que las normas sociales están ahí y es necesario respetarlas.
- De la culpa a la iniciativa
Llegamos al periodo que transcurre entre los 3 y los 6 años, cuando debes comenzar a tomar la iniciativa de trabajar por tus objetivos personales. A veces, esos deseos se confrontarán con los de otras personas, por lo que es necesario que aprendas dos cosas: por una parte, a que tus objetivos sean razonables y, por otra, a tener un gran propósito que te empuje a conseguir lo que quieres.
- De la inferioridad a la destreza
Entre los 7 y los 12 años es habitual que te compares con los demás niños de tu edad. Debes aprender a no sentirte inferior a ellos y manejar una serie de herramientas culturales que te ayuden a integrarte. Es una etapa clave para crecer con una dosis de autoestima que te evite sentirte pequeña al lado de otras personas.
- De la confusión de roles a la identidad
Llegamos a la adolescencia, una etapa clave dentro de la teoría del ciclo vital. La sociedad comienza a demandarte cosas diferentes y, a su vez, experimentas cambios físicos que te hacen sentir distinta. Es cuando tu autoconcepto y tus roles toman forma y empiezas a construir tu identidad.
- Del aislamiento a la intimidad
Esta sexta etapa aparece durante la juventud o el principio de tu adultez. En ella deben convivir el arraigo de tu identidad con los vínculos que generes hacia otras personas. Eso sí, estos vínculos no deberán cambiar tu identidad personal ni tu identidad ser la causante de aislarte socialmente. Es un equilibrio delicado que, una vez conseguido, podrás mantener indefinidamente.
- Del estancamiento a la generatividad
En la adultez media aparece esta séptima etapa, en la que deberás huir del estancamiento y comprometerte con otras personas. Así lograrás una vida productiva y la consecución de tus propósitos o metas.
- De la desesperación a la integridad del ‘yo’
Esta última etapa se da ya en la vejez o en la adultez más tardía. Se trata de evitar la desesperación de mirar atrás con una visión negativa y aprender a estar satisfecha con las decisiones que has ido tomando a lo largo de tu vida.
En esencia, esta es la teoría del ciclo vital de Erikson. Aunque los diferentes ciclos podrían adaptarse a la vida actual, que ha ido cambiando, en esencia son por los que pasamos o vamos a pasar todos. Es posible que en alguna de estas etapas vitales te sientas perdida, o veas cómo personas cercanas a ti intentan atravesarlas sin demasiado éxito y no sepas cómo ayudarles.
En ese caso, siempre tendrás la opción de contactar con una de nuestras videntes, que gracias a su visión y profesionalidad podrán orientarte acerca de cuál es el mejor camino a seguir.
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